En julio del año pasado, Beat recibió un pedido que sorprendería a toda la firma en la región. Una novia, que viajaba junto a su padre enfundada en un vestido blanco, utilizó uno de sus autos eléctricos para llegar frente al altar de un centro religioso en Ciudad de México. No sólo ese día se selló una promesa de amor entre dos personas, sino el romance de la empresa de movilidad con el país.

“El futuro de la movilidad es eléctrico”. Esa es la frase que se repite de manera constante en la voz de los ejecutivos de Beat en México y es que la empresa de movilidad ha decido redoblar su apuesta con una nueva flota de autos eléctricos de la marca JAC, bajo el nombre de Beat Zero.

“Nosotros decimos que es pura matemática: cuando tú sumas conductores contratados, con carros propios, de la mejor calidad y con las mejores condiciones de mantenimiento, con monitoreo 24/7, la suma de las características de servicio te da cero, porque eso te da cero preocupaciones, cero emisiones y limitaciones”, dice Alejandro Arbeláez Jaramillo, gerente regional de Nuevas Verticales de Beat.

El ejecutivo colombiano relata, en entrevista con Forbes México, el nuevo capítulo que escribe Beat frente una flota nueva de autos eléctricos del modelo JAC J7, la cual se encuentra en las profundidades del noveno piso del estacionamiento subterráneo del edificio Puerta Polanco, un proyecto ubicado en la esquina de Ejército Nacional y Periférico, en Ciudad de México.

En octubre de 2020, Beat lanzó al mercado nacional su servicio de transportación privada desde automóviles eléctricos de la marca Tesla.  Así dio inicio una apuesta por la electromovilidad en las calles de la capital del país.

La flota de la marca JAC adquirida por la firma griega fundada hace 11 años representa más de 15% de los autos eléctricos vendidos en México durante 2021. “Es una apuesta muy seria para aumentar el parque automotor eléctrico”, dice Alejandro Arbeláez.

El ejecutivo asegura que con Beat Zero la firma “duplica” su presencia de automóviles eléctricos en Ciudad de México, lo que ha implicado también doblar la capacidad de carga en la capital del país, así como en términos operativos.

En la actualidad, Beat Tesla y Beat Zero suman más de 700 personas (entre choferes y administrativos) en la operación conjunta de estos servicios de movilidad con unidades eléctricas.

“México es en este momento nuestra operación el primer y único país en donde tenemos operaciones de integración vertical, primero con Tesla y, ahora, con Beat Zero”, dice el ejecutivo colombiano, quien prefiere no revelar el monto de la inversión, aunque sí explica que los recursos de la empresa se destinan también a la ampliación de la infraestructura de carga.

Las macrociudades de América Latina, como son las ciudades capitales de Colombia, Chile Perú y Argentina, son las próximas apuestas que este año la firma tiene dentro del mapa para incorporar flotas de autos eléctricos.

Tan sólo con la operación de los autos de Beat Tesla, la empresa contabiliza que se han realizado 3.8 millones de kilómetros el año pasado. La carrera por los autos eléctricos es un negocio que la firma griega no quiere descuidar.

“Beat Tesla logró el ahorro de más de 460,000 kilos de dióxido de carbono que hubieran procesado un año 75,000 árboles pequeños o su equivalente a 18.5 veces el Parque Hundido, consolidándose así como la primera aplicación de movilidad en la CDMX en ofrecer un servicio con vehículos totalmente eléctricos”, dice la empresa.

El conductor de la estrategia
Este ingeniero industrial de 31 años nació en Cali, Colombia. A lo largo de su vida profesional ha trabajado en empresas como Unilever, firma que le permitió viajar a México de forma frecuente.

En octubre de 2018, el colombiano se sumó a la operación local de Beat. “Beat Colombia inició operaciones en mayo de 2018, y yo fui el séptimo empleado en Colombia”, dice el ejecutivo, al recordar los primeros meses de trabajo desde un coworking.

Durante dos años, Arbeláez estuvo al frente del área de Operaciones de Beat en Colombia, así como de la gerencia general y, ahora, regresó a un puesto que le permite mantenerse activo durante los 7 días de la semana dentro de toda la región.

“Me defino como una persona muy enérgica, con mucho foco en la generación de valor. Me gusta que cada cosa que yo hago genere valor […] me defino y defino a la empresa como valiente”, dice Alejandro al hablar del modelo que adoptado la empresa en su oferta de autos eléctricos.

Los choferes de Beat son contratados por la firma y cumplen con 20 módulos de entrenamiento para poder operar las unidades eléctricas, las cuales cuentan con un monitoreo constante de video y geolocalización. El servicio Zero también permitiría reducir el costo de un servicio en auto eléctrico entre un 40 y 45%.

En una economía que se ha distinguido por ofrecer el menor relacionamiento laboral con los conductores de aplicaciones de movilidad, Beat quiere demostrar que su modelo de negocio puede ser redituable para todos los usuarios con socios contratados e independientes. “El mundo no es blanco o negro, sino que hay modelos híbridos que funcionan y nuestra aplicación también”, dice Arbeláez Jaramillo, quien sabe que otras empresas comienzan a seguir sus pasos en México.