Al menos 39 personas murieron y más de 150 mil fueron evacuadas en las provincias costeras de Filipinas tras el impacto del tifón Kalmaegi, uno de los más potentes registrados este año, informaron las autoridades locales.

El fenómeno meteorológico, con vientos sostenidos de hasta 150 kilómetros por hora, tocó tierra en las islas Dinagat, pertenecientes al archipiélago de las Bisayas, poco antes de las 23:00 horas (15:00 GMT), de acuerdo con el servicio meteorológico nacional.

De manera preventiva, alrededor de 156 mil personas fueron trasladadas a refugios temporales, precisó el subdirector de la Oficina de Protección Civil, Rafaelito Alejandro, durante una conferencia de prensa.

Filipinas enfrenta en promedio 20 tifones y tormentas tropicales cada año, la mayoría de ellos con efectos devastadores sobre comunidades costeras de escasos recursos. Con Kalmaegi, el país ya alcanzó esa cifra, señaló Charmaine Varilla, especialista del servicio meteorológico estatal, quien advirtió que aún podrían formarse entre tres y cinco tormentas adicionales antes de que concluya diciembre.

En septiembre, el país fue golpeado por dos potentes tormentas, incluido el supertifón Ragasa, que provocó severos daños en infraestructura, la caída de árboles y 14 muertes en Taiwán.

Los expertos atribuyen la creciente frecuencia e intensidad de estos fenómenos al cambio climático, que estaría generando condiciones más extremas en la región del Pacífico.